El mercado del agua. Conoce a Tatiana Malvasio. Episodio #168. KILIMO.
Nuestro cuento trata de una startup que utiliza la tecnología para mejorar la gestión del agua. Una herramienta que, a través de un software, ayuda a los productores a decidir cuándo y cuánto regar.
Conversamos con Tatiana Malvasio, cofundadora y COO de Kilimo. Ella es una comunicadora social que se define como curiosa e inquieta, con una gran sensibilidad social. Nos cuenta como, desde muy joven ha sentido disgusto por la inequidad de oportunidades aún desde su posición privilegiada. Esta inquietud la llevó a participar en diversas fundaciones de emprendimiento social.
Tatiana se asoció con Jairo Trad, Juan Abdala u y Rodrigo Tissera, quienes giran su mirada hacia la agricultura, factor determinante para la alimentación y el desarrollo económico y social. Fundan Kilimo, término suajili para nombrar la “agricultura”.
La agricultura utiliza en promedio el 70% del agua dulce que consumen los humanos. Ese porcentaje se eleva mucho más en países en vías de desarrollo, donde el porcentaje llega a cifras de entre un 80% y un 90%. Los números asustan si se tienen en cuenta los grandes problemas derivados de la crisis climática.
“La no gestión hídrica es causa principal de la escasez de agua, por la falta de controles del mercado del agua a nivel de cuenca, la descoordinación entre las instituciones relacionadas y el desconocimiento y la falta de fiscalización de las extracciones ilegales de agua”.
Estas consideraciones fueron los factores determinantes en la creación de Kilimo, una plataforma de Gestión de Riego Efectiva, que es simple e intuitiva y no requiere instalaciones, ni mantenimiento. Permite monitorear los cultivos desde cualquier lugar y en cualquier momento y así tomar decisiones de riego de acuerdo con datos confiables
El software creado por Kilimo combina información meteorológica, satelital y de campo para calcular la cantidad de agua que consume un cultivo por día y llevar un balance hídrico ajustado y actualizado de cada sector de riego.
La mayor dificultad, nos cuenta Tatiana, fue tratar de promocionar el cambio y la inclusión de tecnológica en las personas dedicadas a la agricultura, quienes desde siempre y por tradición han realizado su trabajo en forma efectiva.
“La falta de incentivos efectivos en interesantes tuvo detenido el proyecto durante los primeros años, hasta que creamos, el mercado del agua, que permite al productor cobrar por el agua ahorrada. El agricultor paga inicialmente a Kilimo por el servicio, luego nosotros validamos el porcentaje de ahorro de agua y se lo vendemos a empresas interesadas. De esa venta nos quedamos con pequeño porcentaje y la mayor parte se destina al agricultor, esta práctica nos ha hecho crecer”.
La venta del agua se efectúa mediante un certificado NFT que garantiza que el agua se quede en las cuencas y sea un derecho de todos.
El convenio con las empresas surgió del apoyo con Bonneville Environmental Foundation una fundación ambiental de Estados Unidos. Una organización sin fines de lucro que se enfoca en soluciones de agua, carbono y energía para ayudar a combatir el cambio climático y la escasez de agua. “Esta fundación nos ofreció presupuesto de empresas como Google y Microsoft, lo que nos permitió iniciar el primer proyecto”, comenta Tatiana. Luego se han sumado nuevas empresas como Intel y Coca-Cola,
Además de desarrollar y mejorar su herramienta para monitorear y gestionar el riego en la agricultura, Kilimo creó en 2022 el área de Adaptación Climática a través de la cual está impulsando los Proyectos de Compensación. En tan solo un año ha generado alianzas con Intel, Microsoft y Coca-Cola, logrando un crecimiento del 130% en clientes y superficie monitoreada.
Kilimo tiene equipos de trabajo, además de Argentina, en Chile y México y ha ayudado a sus clientes a ahorrar 50.000 millones de litros de agua, Kilimo. Su objetivo inmediato es trascender y abarcar más allá del mercado Latinoamericano. El enfoque se centra en las regiones con mayores necesidades.
El uso de esta herramienta de gestión del agua puede ser llevado a cualquier región ya que, solo requiere el presupuesto para contratar el servicio y los equipos que acompañen a los agricultores.
La startup acaba de ganar el Desafío Global de Agua Dulce (Enterprise Global Freshwater Challenge) que otorgó el Foro Económico Mundial a diez emprendedores, seleccionados de entre más de 400 compañías, que utilicen soluciones basadas en datos para conservar el agua.
Además del premio económico, la startup fue una de las únicas dos seleccionados para presentar sus soluciones en la reunión Anual del Foro Económico Mundial 2023 en Davos, a donde viajó Malvasio para hablar ante los líderes del mundo.